Reseña publicada en la revista «El Sábado» del diario El Mercurio, 5 de noviembre de 2011
Cualquiera que vea un axolotl y haya leído previamente el cuento de Cortázar con ese título, debería exclamar de inmediato: ¡ahora entiendo! Es que esta larva-renacuajo tiene una fisonomía tan particular como delicada, tan seductora en su extrañeza que, claro, más de alguien puede quedarse embobado ante esos ojos que no parpadean detrás del vidrio de la pecera. Con toda razón Roger Bartra, el destacado antropólogo mexicano responsable de este también particular y seductor libro, cita un provocador concepto de Lévi-Strauss en el prólogo: a la hora de señalar animales totémicos, «las especies naturales no eran elegidas por ser “buenas para comer” sino por ser “buenas para pensar”». Animales que provocan la reflexión y que funcionan como un espejo de la identidad de un pueblo. Al menos esa es la tesis de Bartra para el axolotl y aquí trata de demostrarlo mediante un ingente acopio de materiales de muy distinto orden. Desde sus propias tesis sobre la mexicanidad y el axolotl hasta poesías y cuentos especialmente encargados para este libro, desde textos clásicos donde la larva-renacuajo es protagonista –donde se puede encontrar a Cortázar, claro, pero también nombres tan sorprendentes como los de Aldous Huxley, Primo Levi o Giorgio Agamben- hasta una abundantísima muestra de pinturas, fotografías, esculturas e ilustraciones que muestran a las claras la relevancia del axolotl en el imaginario cultural de su territorio de origen. Sin olvidar, por cierto, a los historiadores y naturalistas, donde se encuentran, a unas decenas de páginas de distancia, fray Bernardino de Sahagún y Stephen Jay Gould. Si se quiere comprobar lo lejos que ha llegado su influencia, basta señalar que Mudkip y Wooper, dos miembros destacados de la familia Pokémon, están inspirados «en la extraordinaria morfología del axolote mexicano».
Axolotiada. Vida y mito de un anfibio mexicano es, pues, una suerte de enciclopedia sobre el axolotl, axolote o ajolote, un animal cuya impresionante potencia simbólica es abordada en este libro desde múltiples aristas. Su lectura, un recorrido fascinante por la iconografía, las ideas y las historias inspiradas por el bicharraco de marras, pone también de manifiesto cuán lejos puede llegar la reflexión sobre un animal totémico, bastante más profunda y extendida de la que tenemos, por ejemplo, sobre el cóndor o el huemul.
Roger Bartra. Fondo de Cultura Económica, México, 2011. 415 páginas.